Te recuerdo Amada
En los perfiles sonrosados del cielo
Al forjar ocasos en el horizonte
Recortada tu figura solitaria en el paisaje solitario
Entremezclada entre hojas secas y lluvia fina
Te evoco grácil y humanamente graciosa
Retozando como niños
O el beso primero robado a tu rubor.
Te forjaste amada en los caprichos del destino
Pero me elegiste a mi
La encrucijada se hizo una sola senda
Recorrida por los dos caminando nortes.
Te recuerdo amada
Hoy cuando las hebras de plata
Refulgen en tus sienes
Siempre niña siempre amada
Aunque la vera perdiera nuestras sendas.
(Adalberto Ascuña)